Salimos de Millau bastante tarde por que nos entretuvimos bastante en el viaducto. Pasamos por Béziers, Colliure y entramos a España por Portbou.
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Tras desayunar como siempre (zumo, croissant y café), salimos de Millau por la D41 para ir a la base del viaducto y hacer algunas fotos.
Bajo el viaducto |
Qué pequeño se ve todo al lado de los pilares. |
Los pilares tienen una altura de entre 70 y 286 mts, y la placa de asfalto está a unos 270 mts de altura en su punto más alto.
Tiene una longitud aproximada de 2.400 mts., y una anchura de unos 32 mts., lo que da margen para tener 2 carriles en cada sentido de circulación y unas anchas aceras a cada lado.
Tardaron unos 4 años en construirlo, y fué el 4 proyecto presentado en el concurso.
La verdad que rodar por él no impresiona, por que con su anchura y las protecciones laterales (más altas que un camión), no tienes la sensación de ir tan alto. Impresiona más cuando lo ves desde abajo. Aquí dejamos un video filmado desde la moto con una de las cámaras pequeñas.
Hicimos una compras de última hora por Millau y en el área de servicio del viaducto antes de emprender el último tramo de viaje. Esto hizo que salíesemos realmente tarde, más o menos a la 1 del medio día, así que pensamos en parar en Béziers a comer para que no se nos hiciese demasiado tarde.
No tenía ni idea de cómo era Béziers hasta que llegamos. Es un pueblo situado en la parte alta de una montaña, y para subir al centro lo hicimos por una calle empedrada, y empinada, claro.
Comimos una paella mixta "Paellador". Ya sé, manda narices que estando a tan poco del país de las paellas la fuesemos a comer en Francia. Es lo que hay. No te puedes resistir a según que cosas después de unos días con comida "afrancesada".
Eso si, mientras nos comíamos la paella en una terraza al lado del ayuntamiento de Béziers tuvimos un espectáculo de lo más curioso.
Ese día se celebraban varias bodas. Tantas que parecía que iban a destajo, por que en apenas 30 minutos se presentarón allí 5 novias y sus respectivos invitados (no vimos, o reconocimos a tantos novios), y en menos de 45 minutos más tarde allí no quedaba ni el "tato".
Ayuntamiento de Béziers |
Plegamos velas y salimos de Béziers dirección Narbone, donde dejaríamos la autopista para ir a Colliure.
Rodando por la D914 |
Entrando en Colliure |
Colliure es un pueblo pequeño en la costa mediterránea con aspecto de no haber cambiado en los últimos 50 años. Es realmente encantador (un poco cursi la expresión ¿no?).
Hicimos un alto que aprovechamos para comprar un imán, bebernos una cervecita contemplando tranquilamente la playa y el mar.
Con estas vistas, ¿quién no se toma algo tranquilamente? |
Después de poner gasolina en en el área de L'Empordà y cenar algo ligero por que se nos haría tarde para llegar a casa y encima hacer la cena. Amén de las pocas ganas de hacerlo después del viaje.
El final del viaje no tiene gran historía, simplemente rodar por la AP7 de noche desde Figueres hasta casa, descargar la moto y dejarla dormir en el parking (que bien se ha ganado un descanso).
Igual que sucedío con la vuelta a España el año pasado, el sentimiento de haber acabado es entre triste y alegre.
Por un lado, triste por que ya no hay más..., alegre por que el viaje ha sido fantástico y la idea que tenía de rodar por Francia de Sur a Norte y volver has sido un buen planteamiento: lleno de ciudades y pueblos, paisajes e história.
Solo me quedan un par de entradas más para cerrar este viaje: una para poner algunos datos y más fotos, y otro con las impresiones finales.
En breve más........
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